“Conservatorio Celestial”: Historia de la exposición de Zaida Gonzalez #MemorabiliaCAA
El 2004 se realizó en Centro Arte Alameda una Feria de la Mujer, donde se ponían puestos con gastronomía mapuche, con exposiciones de arte y distintas actividades. Yo participé en esa oportunidad con mi trabajo “Conservatorio Celestial” que son los retratos de guaguas muertas que colgué en pequeño formato en la pared de madera.
No sé como, se corrió la voz de que estaba expuesto esto ahí. Llegó a oídos de la prensa y también a algunos políticos. Se empezó a armar una tremenda revuelta y comenzaron a llamarme por teléfono, en esos años se hacía un programa en La Red y en el Canal 11; creo que era el antiguo “Termómetro” donde hacían unos debates y discusión y siempre llevaban a un artista, varios de los que fueron estaban trabajando con temas políticos, por ejemplo estaba, Verdejo que hizo unos fetos de silicona y los expuso en La Perrera, también estaba el mismo Antonio Becerro que trabajaba la taxidermia con animales y el Luizo Vega con la “Baby Vamp”.
Había invitados todas las semanas y los humillaban, me acuerdo que al Luizo le pegaron, el Becerro tiró una bolsa con un perro muerto. A mí me empezaron a hostigar esos programas para que yo fuera, por supuesto, no quise exponerme, porque encontraba que era súper violento y ridículo. Yo estaba recién empezando, era chica, tenía veintitantos años y me daba terror enfrentar todo esto, además que los fetos, con los que yo trabajé habían sido facilitados bajo una confidencialidad. El asunto es que hasta un diputado se metió. Nicolás Monckeberg apareció diciendo que yo me robaba las guaguas del hospital y que me tenían que investigar.
Todo esto sucedió a raíz de la exposición en el Alameda. Un medio fue allá a grabar la exposición y yo no estaba, le pedí a Roser si ella podía dar la entrevista y accedió. Así que salió en la tele hablando con las fotos atrás y le preguntaban que cómo había autorizado exponer eso, que si acaso no había niños, y ella decía “claro que hay niños, qué tiene que hayan niños”.
Roser defendió todo el tiempo la postura de la exposición en el contexto de la Feria de la Mujer, siento que me salvó. Ella tenía mucha más experiencia para desenvolverse con las palabras y mantener firme la postura y lo hizo hasta el último momento, siempre estaré muy agradecida.
